Retorno de la protesta: La crisis no es sólo la pandemia, es el gobierno de hambre.

Bastó la cadena nacional de Piñera el día domingo y una nueva conmemoración del inicio de la rebelión para que las calles volvieran a expresarse en medio de la crisis sanitaria y económica: hay hambre. 

Es contra el hambre

Durante la jornada de este lunes, fueron cientos de personas en comunas como El Bosque y La Pintana las que salieron a la calle a protestar contra la gestión del gobierno. La zona sur de Santiago volvió a ver barricadas y la exigencia por comida quedó sintetizada en un vídeo altamente difundido por redes sociales de un vecino de El Bosque: “El Estado ha estado ayudando a los empresarios y los bancos y todo. No es contra la cuarentena, es contra el hambre”.

Se comienzan a sufrir las consecuencias de la política defendida por el gobierno, y de forma agresiva, queda en evidencia todo el plan de salvataje empresarial con el fin de beneficiar el “crecimiento” de la economía. Comenzaron por no tomar medidas efectivas a nivel sanitario y que continuaron con la Ley de Protección al Empleo, la cual le garantiza al empresario el no pago de los salarios. Hoy, todo esto se traduce en que no hay trabajo, no hay salud, y falta el pan. 

Hasta la fecha son cerca de 80 mil empresas que se acogieron a la ley mencionada, obligando a sus trabajadores y trabajadoras a autofinanciar sus sueldos con el fondo de cesantía. El gobierno para sacar esta ley, contó con el apoyo del conjunto del arco político del Congreso, incluido el Partido Comunista.

Más allá de la demagogia, lo cierto es que la situación es una verdadera tragedia para las mayorías del país a las cuales les resulta imposible llegar a fin de mes. Siguen disminuyendo los sueldos, suspendiendo y terminando contratos, mientras las medidas del gobierno parecen una mala broma. Están descargando la crisis económica contra quienes trabajamos.

El virus del gobierno.

«El coronavirus está muy feliz de cómo están actuando estas personas». Con estas palabras el intendente de la Región Metropolitana, Felipe Guevara, hizo referencia a las manifestaciones de este lunes. Una burla directa contra quienes hoy sufren el hambre. A su vez, amenazó con querellarse contra las y los manifestantes. Amenaza que finalmente cumplió y hoy son 15 les afectades por el autoritarismo del Estado.

En esta sintonía y en pleno programa televisivo, el alcalde derechista de la comuna de La Florida exclamaba “reprímanlos” y “dispárenles”, mientras pasaban imágenes de la protesta. Sin ningún reparo, la derecha saca a relucir su nostalgia por la dictadura.

Un gobierno que ha violado sistemáticamente los derechos humanos desde el 18 de octubre hoy tiene nuestras vidas dependiendo de su gestión. Esta situación ha sido permitida por el Frente Amplio que firmó el Pacto por la Paz y la Nueva Constitución y por el Partido Comunista, quienes no activaron ni activan la lucha sindical, siendo que dirigen la CUT, además hoy votan leyes favorables a los empresarios. Esto es lo que llaman “oposición”.

Anticapitalistas en defensa propia. Necesitamos un plan de emergencia

Hoy, lo esencial es cuidar la salud y la vida de millones de trabajadores y trabajadoras en todo el país. Para ello, es necesario imponer un programa que garantice una cuarentena con salarios dignos, con necesidades básicas satisfechas y sin represión ¿cómo lograrlo? Pues afectando los intereses de los ricos y poderosos, aplicando fuertes impuestos a las fortunas, declarando de utilidad pública y expropiado sin pago todas las empresas que despidan o suspendan y poniéndolas bajo control de sus trabajadoras y trabajadores. Declarar de utilidad pública el conjunto del complejo sanitario del país y estableciendo un sistema único, nacional, público y gratuito de salud dirigido por los y las profesionales de la salud. 

Estás medidas servirían para torcer el rumbo y como decimos, garantizar la salud y la vida por sobre las ganancias empresarias. Hoy más que nunca, ser anticapitalista es una cuestión de defensa propia. 

Joaquín Araneda, Movimiento Anticapitalista.