El pasado 6 de Octubre se realizó una nueva alza al transporte, servicio de buses Red (ex – Transantiago, metro y tren central), en un marco de paquetes de cambios que entre ellos incluye el alza del transporte, dejando así el valor del metro en horario punta en $840 y la micro en $710. Esta alza se inscribe en un nuevo golpe al conjunto de la clase trabajadora, que solo hace seis meses atrás, ya había tenido un alza.
Esto ha desencadenado la organización de las y los estudiantes secundarios, que llevan días de movilización en distintas estaciones de metro, llamando al no pago del pasaje ¡“evadir, no pagar”! para poner freno a las alzas. La respuesta del gobierno ha sido tajante, estaciones de metro que parecen un verdadero estado de sitio, represión y detenciones arbitrarias hacia los movilizados.
Medidas para los especuladores, un desastre para quienes trabajamos.
Este paquetazo de aumento en los valores, tanto en el transporte como también en los productos de alimentación, se encuentra en el marco de un plan de ajuste del gobierno sobre la espalda de las y los trabajadores y el pueblo, un plan que lo escudan con el estancamiento del crecimiento económico no auspicioso por el Banco Central, quien lo determino en un 2,6% para el presente año. Los salarios en los últimos años han tenido un aumento de un 40%, mientras el alza en los servicios sobrepasa el 70%.
Los salarios se mantienen precarizados, la cesantía viene en aumento y crecen a diario el mal llamado trabajo por “cuenta propia” como respuesta de subsistencia de los desempleados. Mientras el gobierno sigue destinando fondos a los privados para mantener los porcentajes de ganancia, como es el caso de Metro S.A. Las direcciones burócratas de la CUT siguen manteniendo un silencio cómplice frente a los golpes en el costo de la vida.
La lucha que están llevando las y los estudiantes en las calles, ha sido brutalmente criminalizada por el gobierno y los medios de comunicación, justificando el descontrolado y violento actuar de las fuerzas represivas, así como también amenazando a los movilizados con quitarles la Tarjeta Nacional Estudiantil (TNE).
Vamos por un plan de lucha para poner freno a las alzas
La movilización debe continuar agudizándose, la lucha que están liderando las y los estudiantes secundarios debe sumarse el conjunto de las y los trabajadores, llevando adelante un plan de lucha que llame a una coordinación nacional para poner freno a las alzas en el transporte. Es en ese camino que las centrales sindicales deben salir de su pasividad y fomentar la protesta junto a las y los usuarios del transporte.
Nuestra propuesta va en sintonía por recuperar el transporte público para el 99%, por la estatización sin intermediarios de sociedades anónimas, que hacen de un derecho un tremendo negocio, esto bajo control de las y los trabajadores para la planificación del transporte público a un costo justo, de calidad y no contaminante.
Camila Millaray
